Presion de los neumaticos: ¿Sabes cual es la adecuada para tu coche?

Los neumáticos: Esos grandes olvidados en lo que a mantenimiento preventivo del coche se refiere. Y si, has leído bien: grandes olvidados. Ya que a pesar de no parecerlo a primera instancia; el desgaste de los mismos puede inducir problemas de estabilidad a la hora de conducir; y en algunos casos incluso, accidentes de tráfico.

Lo principal a tener en cuenta a la hora de hablar del mantenimiento preventivo de los neumáticos, es que debemos  inspeccionar su desgaste y la presión de los mismos de forma regular. Ya que unos neumáticos desgastados en exceso, pueden traer como consecuencia el aumento de la distancia de frenada, cierta inestabilidad al volante y el casi siempre peligroso efecto  'aquaplaning'. Problemas que también se pueden dar, en el caso de que los neumáticos no cuenten con la presión adecuada.

Sabiendo la presión necesaria para cada modelo

La presión neumática media recomendada por los expertos en la materia, suele ser de unos 2,5  bares. No obstante debemos aclarar que dicha medida al ser la 'media', puede que no sea la ideal para tu vehículo. Por lo que siempre es recomendable consultar una tabla de presiones, o en su caso, la documentación oficial del fabricante. Es muy importante resaltar, que a la hora de medir el aire de los neumáticos estos estén fríos. De lo contrario, podríamos obtener resultados erróneos debido al calentamiento. 

También debemos anotar, que en el caso de los vehículos equipados con sistemas de monitorización de presión (TPMS); no será necesario comprobar la presión de los neumáticos. Siendo obligatorio además el uso de dicho sistema para todos los nuevos turismos que se fabriquen en la unión europea.

Mucho cuidado con el aquaplaning

El aquaplaning no es más que la perdida de contacto entre el neumático y la calzada: Debido a que alrededor del mismo se crea una capa de agua, de aproximadamente medio milímetro. Dicho fenómeno suele ocurrir cuando al incrementar la velocidad del vehículo, el agua no puede ser desalojada  por el frente del neumático - debido al aumento repentino de velocidad - ni a través de los dibujos de la rueda. (Ya que estos están o bien desgastados o el neumático bajo de presión).

 Dicha capa de agua, trae como consecuencia directa, el aumento de la distancia de frenada; y la siempre peligrosa, pérdida del control de la dirección.

Gas para neumáticos, ¿realmente necesario?

¿Le han ofrecido llenar sus neumáticos con gas en lugar de aire?. Muchos talleres y tiendas de neumáticos ofrecen dicho servicio argumentando que esto evitará que tengas que revisar la presión de forma regular. Ya que en teoría una rueda llena de nitrógeno (el gas utilizado para llenar los neumáticos) suele perder presión más lentamente que una llena de aire.

Entonces, ¿merece realmente la pena inflar nuestros neumáticos con nitrógeno?. Bueno, para responder esa pregunta debemos primero dejar claro que el 78%  del aire que un compresor inyecta a la rueda es nitrógeno; siendo el otro 22% oxígeno. Por lo que el aumento de un 22%  de los niveles de nitrógeno, en el caso de los turismos no supone un cambio, lo suficientemente grande para hacer alguna diferencia . 

Consejos para alargar su vida útil

Al igual que con el resto de las piezas de tu vehículo, con los neumáticos también es necesario seguir ciertas pautas o consejos; para evitar en buena medida, el desgaste de los mismos. Dichas medidas pueden resumirse en:

1- Controla su presión: Tener los neumáticos a punto, en lo que a presión se refiere( ni alta ni baja), no solo ayudará a evitarte problemas a la hora de conducir. También evitará que estos se desgasten de forma prematura. 

2- Mantenlos equilibrados: El equilibrado de los neumáticos no solo ayudará a evitar que estos se desgasten de forma prematura. También ayudarán a proteger del desgaste a la suspensión, la dirección y la transmisión de tu vehículo.

3- Mantenlos alineados: Es importante que las neumáticos estén correctamente alineadas respecto al eje. Ya que de lo contrario notaremos que el vehículo nos tirará hacia un lado. Causándonos problemas a nuestra conducción, y por supuesto el desgaste prematuro de nuestros neumáticos.

4- Cambia las válvulas a menudo: Si cuando cambias los neumáticos cambias también las válvulas, evitarás que el desgaste de las mismas haga que los neumáticos pierdan presión y por lo tanto se desgasten mucho más rápido.